Las articulaciones pueden presentar deformidades, cuando la relación entre las dos superficies articulares se pierde de manera completa (luxación) o cuando la pérdida de relación de las superficies articulares es incompleta (subluxación). En ambos casos existe inestabilidad y generalmente, se asocia con algún tipo de deformidad.
La movilidad excesiva de la articulación puede producirse de manera congénita o porque hay lesiones que producen un estiramiento o desgarre de la cápsula,; por ejemplo, un esguince, produciendo una deformidad cuando se transmite la fuerza a la articulación.
TIPOS DE DE DEFORMIDADES ARTICULARES.
Las causas que puede haber en estas deformidades son:
Anomalías congénitas del desarrollo articular: Producen deformidad tanto por laxitud como por contractura.
Deformidades adquiridas de la articulación: Por un traumatismo o por una infección. Pueden ser traumáticas, un traumatismo incide sobre la articulación y hace que se pierda la relación entre las superficies o patológicas, se desarrolla una enfermedad que produce inflamación o infección de la articulación generando pérdida de contacto de las superficies.
Causas de las Deformidades Articulares.
Bloqueos mecánicos generados por alteraciones de la articulación: Por ejemplo como consecuencia de la artrosis o de un traumatismo, también puede ser causado por la alteración de estructuras cercanas a la articulación, por ejemplo el desgarro de un menisco.
Otras causas que produzcan deformidades articulares pueden ser:
El envejecimiento de la persona.
Las adherencias articulares.
Artritis reumatoidea
Artritis séptica forman adherencias dentro de la articulación, estas adherencias limitan la movilidad de la articulación y provocan la deformidad articular, generalmente una contractura en flexión o limitación de la movilidad en algún rango. También hay adherencias extraarticulares, se produce una adherencia con la cual el músculo no puede deslizarse. Tanto si las adherencias son intraarticulares como extraarticulares, la limitación de la movilidad articular, va ha ser el origen de una deformidad de la articulación.
Las contracturas musculares. Un acortamiento persistente que resista al estiramiento, puede ser consecuencia de una inmovilización prolongada o de una isquemia del músculo, puede dar lugar a una deformidad articular, que generalmente esté controlada por dicho músculo.
El desequilibrio muscular, que implica que los músculos agonistas y antagonistas, pueden estar alterados porque un grupo de estos músculos esté contracturado o paralizado. En una parálisis flácida, el músculo no tiene capacidad de contracción. En una parálisis espástica el músculo no es capaz de relajarse, está producida por parálisis cerebral.
Las contracturas fibrosas de las fascias y la piel. Pueden ser producidas por situaciones tan dispares como grandes quemaduras o la enfermedad de Dupuytren, que cursa con la retracción de las fascias.
Compresiones externas. Por ejemplo los zapatos de tacón tienden a deformar la alineación del primer dedo del pié con el metatarsiano
Etiología idiopática o desconocida